Los movimientos feministas y de concienciación para protegernos, crecen a la vez que tomamos medidas para el autocuidado entre mujeres contra el acoso en línea y el ciberacoso. La tecnología y las redes sociales pueden facilitar más que nunca que los acosadores difundan mensajes tóxicos, y estas acciones pueden tener un impacto significativo en el bienestar de una persona.

Es vital que las mujeres den prioridad a su salud mental y emocional cuando utilicen Internet y las redes sociales. Y existen algunas prácticas de autocuidado que pueden ayudar a protegerse contra el acoso en línea.

1. Establece límites emocionales

Uno de los métodos clave para protegerse contra el acoso en línea es establecer límites emocionales.

Esto implica hacer balance de los tipos de mensajes y comentarios que son bienvenidos, así como de los que son perjudiciales. Al hacer esto, las mujeres pueden priorizar mejor los mensajes y notificaciones que reciben, ayudando a dejar de lado la negatividad y dar prioridad al contenido que aporta alegría e inspira crecimiento.

Las mujeres pueden lograrlo filtrando los tipos de contenido que consumen, limitando las notificaciones que reciben de usuarios individuales y creando listas de amigos y familiares cuyos mensajes son siempre bienvenidos.

Además, las mujeres también pueden utilizar la configuración de privacidad para ocultar contenidos a los usuarios que no estén en su lista aprobada de amigos o seguidores. Esto puede ayudar a minimizar el impacto del contenido negativo o tóxico difundido a través de las redes sociales.

2. Crear redes de apoyo en línea

Es muy importante establecer límites, puede ser útil para las mujeres crear y alimentar redes en línea sanas y de apoyo. Al rodearse de personas amables y solidarias, las mujeres pueden reducir el impacto que puede tener en ellas el comportamiento tóxico de los demás.

De igual manera, es estratégico crear grupos, ciberpatrullaje o foros de chat dedicados a conversaciones positivas y al apoyo puede ser increíblemente beneficioso. Esto permite a las mujeres conectar directamente con otras que comparten objetivos e intereses similares.

Participar regularmente en estos grupos en línea puede recordar a las mujeres que no están solas en su experiencia. Y que siempre hay quien puede ofrecerles palabras amables de apoyo o consejo.

3. Practica la desintoxicación digital

Estar constantemente conectada a la tecnología puede ser a menudo abrumador y provocar fatiga y agotamiento. Tomarse descansos regulares de Internet y las redes sociales puede ser una forma estupenda de recargar las pilas.

Participar en otras actividades, como escribir un diario, hacer ejercicio o dedicarse a otras aficiones, puede ayudar a relajarse y distraer la mente de contenidos tóxicos y poco saludables.

Actualmente, es muy fructífero unirse a grupos de apoyo, dedicarse a una nueva afición o actividad física. O incluso hacer nuevos amigos en el mundo físico, puede ayudar a las mujeres a centrarse en su propio bienestar y cultivar un espacio libre de la toxicidad que tan a menudo se encuentra en Internet.

Estar en contacto con el mundo físico puede ser increíblemente enriquecedor y edificante.

Definitivamente en la unión está la fuerza

Poniendo en práctica estos tres métodos de autocuidado, las mujeres pueden sentir que controlan mejor sus experiencias en Internet y protegerse mejor contra el acoso y el ciberacoso en la red. Además, la sensibilidad ante los mensajes tóxicos y el mantenimiento de relaciones sanas y de apoyo en Internet son fundamentales para fomentar una presencia sana en la Red. De igual modo, es importante que las mujeres se tomen descansos regulares de la actividad en línea para recargarse y rejuvenecer. Al hacerlo, las mujeres pueden tomar medidas para reducir los efectos nocivos del acoso en línea.