NEUROCIENCIA Y SU APORTE A LA EDUCACIÓN 

¿Cómo puede la neurociencia contribuir al aprendizaje? 

Se dice que no hay nada más humano que el cerebro humano. Y nada más cierto. Al igual que nosotros, a lo largo de nuestra vida, nuestro cerebro cambia constantemente y su desarrollo puede verse afectado con cada una de las actividades que realizamos. Es por eso que muchos consideran que comprender cómo funciona este órgano es fundamental para mejorar la forma en la que aprendemos. Es aquí, cuando la neurociencia juega un papel fundamental en el aprendizaje. 

La neurociencia aplicada a la educación es un área de investigación que ha ido creciendo durante las últimas décadas, si bien aún hay varios expertos que consideran que ambas disciplinas hablan idiomas completamente diferentes y por lo tanto su integración resulta improbable. No obstante, existe bastante evidencia que confirma lo contrario. Por tanto, para que la neurociencia aplicada a la educación emerja como una disciplina distinta por derecho propio, se deben superar las fronteras y los métodos tradicionales, y se debe establecer una infraestructura que permita el intercambio colaborativo y productivo entre ambas disciplinas. 

En todo caso, parece que el problema tiene que ver más con el enfoque, de modo que, para superar la diferencia de lenguaje entre la neurociencia y la educación, los expertos sugieren modificar la perspectiva a través de la cual se ven ambos campos. Es decir, considerar la neurociencia como un respaldo de la educación de la misma manera que la biología sustenta la medicina; así, cada campo de estudio puede conservar su autonomía, pero sin anular las leyes del otro. De la misma forma en que la práctica médica no es un experimento biológico, las aulas no son espacios de experimentación neurocientífica. 

Actualmente, los avances y las últimas tendencias en neurociencia han logrado cerrar la brecha entre la comprensión del aprendizaje a nivel cognitivo y la aplicación de este conocimiento en entornos educativos motivadores, creativos y disruptivos, lo que ha permitido mejorar entonces, en muchas ocasiones, los resultados y el bienestar de los estudiantes. 

De manera tangible, la neurociencia contribuye a identificar con mayor eficacia a aquellos estudiantes que presentan discapacidades de aprendizaje, así como a brindar intervenciones que pueden ayudar significativamente a los estudiantes con su desempeño académico. Por ejemplo, son conocidos los casos en que la neurociencia ha identificado con anticipación los mecanismos de la dislexia y ha revelado cómo la ansiedad, la atención, las relaciones y el sueño afectan en los resultados educativos. 

Entre los beneficios observados por la Asociación Colombiana de educación privada y nuestro equipo indagamos que ha brindado la neurociencia aplicada a la educación a lo largo de los últimos años encontramos algunos observado les dejamos a continuación: 

Una mejor comprensión del desarrollo infantil 

Comprender qué impulsa a los niños a aprender y cómo superar las adversidades en este aspecto puede tener un gran impacto en el éxito del aprendizaje a lo largo de los años. 

Adecuación de clases para facilitar el aprendizaje 

Muchas escuelas han cambiado sus programas y rutinas para beneficiar el progreso de los estudiantes. Por ejemplo, retrasando las horas de inicio de clase, puesto que hay investigaciones que demuestran que tan solo treinta minutos más de sueño pueden mejorar enormemente la función cognitiva del educando.

Otro cambio importante que se ha hecho en algunos centros de estudio es permitir que los estudiantes elijan entre una guía de cursos diversa y lecciones espaciadas a lo largo del tiempo, ya que, de acuerdo a la neurociencia, el espaciamiento permite aprender conceptos complicados, mejora la comprensión y la creación de nuevas neuronas. 

Tutoría cognitiva e incorporación de actividades sociales 

El uso de tutorías cognitivas en estudiantes con problemas para aprender matemáticas ha representado un cambio favorable para los educadores, quienes han constatado cambios al mejorar la forma en que se procesan y comprenden las matemáticas es fundamental para el éxito. De igual manera, se ha comprobado que la incorporación y el enfoque en actividades sociales en el aula han contribuido enormemente a facilitar el aprendizaje de los alumnos. 

Una mejor y mayor integración de la tecnología en el aula 

Las computadoras y el uso de la tecnología están cambiando la educación formal y los maestros no solo necesitan mantenerse actualizados, sino que también deben aprender a usar la tecnología en su beneficio cuando trabajan con los estudiantes. Gracias a la investigación de cómo aprendemos es que se han podido desarrollar aplicaciones que permiten involucrar más eficazmente a los estudiantes en sus propios procesos de aprendizaje. 

Mejor enfoque en el aprendizaje de alumnos que se encuentran en el espectro 

Gracias a los avances en neurociencia se logra diagnosticar cada vez más rápido a los niños que presentan autismo y síndrome de Asperger, en algunos casos se ha logrado un diagnóstico certero en individuos con tan solo dieciocho meses de edad. El departamento de Neurociencia de Cambridge incluso ha desarrollado un material animado para ayudar a los niños pequeños a aprender sobre las emociones.

En este mismo orden de ideas, los programas especializados impulsados por la investigación neurocientífica contribuyen a mejorar la forma en que enseñamos a los niños que se encuentran en el espectro. 

Superar las dificultades de aprendizaje 

En el campo de la educación especial, la neurociencia ha beneficiado a niños con diversas problemáticas en el aprendizaje, como la dislexia o el TDAH. Los educadores que se han tomado el tiempo para aplicar los hallazgos científicos en clase han podido advertir una marcada diferencia en la forma en que se desarrollan sus estudiantes. 

Como conclusión, debemos reconocer que si bien la comprensión que tenemos de nuestro cerebro ha avanzado mucho en los últimos años, aún tenemos un largo camino por recorrer. La enseñanza implica cambiar el cerebro, pero también significa comprender que cada cerebro es único y procesa la información de manera diferente. 

Ahora, les dejamos un webitaller que hemos compartido en empowerTIC recientemente en manos de nuestra conferencista María Eugenia Gómez quien nos aproximó al tema de la neurociencia.

Finalmente, les dejamos algunas referencias de investigaciones recientes que estamos seguras permitirá ampliar el tema: 

Aragoneses, M. T. M., Casas, E. E., Martín, E. L., & Nieto, D. A. (2021). Percepciones de los educadores sobre el papel de la neurociencia en educación: resultados de un estudio en España. Bordón: Revista de pedagogía, 73(3), 81-97.

Arias Salegio, I. S., & Batista Mainegra, A. (2021). La educación dirige su mirada hacia la neurociencia: retos actuales. Revista Universidad y Sociedad, 13(2), 42-49. 

Asitimbay, A. C. (2021). La neurociencia educativa: Una propuesta ante la necesidad de una educación de calidad en Ecuador. Dominio de las Ciencias, 7(1), 239-260. 

Ayala, M. F. S., Vasco, J. A. V., Jiménez, R. B. R., & Ayala, M. P. S. (2022). La neurociencia en la Educación Superior, perspectivas en la enseñanza, comportamiento y desarrollo de la creatividad. Revista Imaginario Social, 5(1). 

Baldevenites, E. V. L., Sánchez, E. E. L., & González, A. M. G. La neurociencia como formación en el proceso de enseñanza para educación media superior y superior “Pasos de elefante”. 

Carvajal, R. (2021). Modelo CREA: Cómo aplicar los descubrimientos de la Neurociencia para mejorar la enseñanza.

Pérez-Puelles, L. G. (2021). LA NEUROCIENCIA EDUCACIONAL: Un nuevo desafío para los educadores: NEUROCIENCIA EDUCACIONAL. Didasc@lia: didáctica y educación ISSN 2224-2643, 12(2), 157-173. 

Redón, R. C. (2021). Conexiones entre la Neurociencia Cognitiva y Educación. Aportes en el estudio del Aprendizaje. Sistemas Humanos, 1(1). 

Salazar, F. J. C., & Guecha, L. Y. D. Reflexión teórica y pedagógica del aporte de la neurociencia en la Educación Inicial. Verdugo-Coronel, C. G., & Campoverde-

Yanez-García, B. M., Zambrano-Gallardo, G. E., & Santos-Zambrano, Y. M. (2021). Neurociencias cognitivas, neurociencias de la educación y el aprendizaje del inglés. Confluencias necesarias. Maestro y Sociedad, 18(3), 1001-1015. 

Esperamos sea de utilidad este contenido y tus comentarios de vuelta. Gracias por leernos.